La combinación del gris con la madera siempre es una apuesta segura en decoración y es aún más cierto en las cocinas. No obstante, es posible jugar con el equilibrio de fuerzas entre ambos para tender a un estilo o a otro. La idea principal consiste en decidirse entre dos posturas: apostar por la intensidad del color gris o por la fuerza del material de madera.
Si te inclinas por el predominio del gris, por ejemplo con los muebles y la encimera en versión monocromática, añadir madera en pequeños toques servirá para atraer la mirada hacia ciertos detalles que marcan la diferencia. Entonces elige maderas nobles para reforzar esa idea de refinamiento: con una mesa de nogal o una credencia de madera de alerce, la cocina gris se convierte en una declaración de intenciones.
Con un equilibrio perfecto de gris y madera, nos adentramos en un mundo más acogedor. Combinar muebles de tonos gris pastel con una isla central de madera, por ejemplo, crea un ambiente a la vez auténtico y de tendencia.
La última opción es una cocina equipada de madera con una presencia sutil del gris. Con esta propuesta se pretende infundir un estilo moderno a un interior clásico.